El Miñardi fue traido a América por las Misiones Jesuíticas.

Español

miñardí

Historia del Crochet

Tu y yo lo llamamos crochet, como lo hacen los franceses, belgas, hispanos e italianos. Los holandeses lo llaman “haken”, los dinamarqueses “haekling”, los noruegos “hekling” y los suizos “virkning”.

Gracias a estudios arqueologicos, fuentes escritas y representaciones ilustradas se ha llegado a la conclusion que el crochet, el bordado y otros estilos de tejidos datan de tiempos muy antiguos. Pero no hay una fecha fija de cuando se inicio este arte. La palabra viene de “croc” o “el croche” que es una palabra francesa para el gancho, y para los nordicos la palabra era “krokr”.

Segun Annie Potter, experta en crochet, el arte moderno del crochet como nosotros lo conocemos data del siglo XVI. Se conocia como “cordon del crochet” en Francia y “cordon de cadena” en Inglaterra.

Para Lis Paludan, otro escritor-investigador, quien limito su busqueda de los origenes del crochet en Europa, nos da tres interesantes teorias:

*El crochet se origino en Arabia, desde el este del Tibet, hasta el oeste de España, siguiendo las rutas comerciales de los arabes hacia otros paises mediterraneos.

*La evidencia mas temprana del crochet provino de sudamerica, en donde una tribu primitiva uso adornos hechos a crochet en sus ritos de pubertad.

*En china, se encontraron ejemplos tempranos de muñecas tridimensionales hechas a crochet.

Pero, segun Paludan, en el fondo no hay evidencia convincente de como es el viejo arte del crochet o de cuando se inicio. En Italia se conocio en el siglo XVI como “trabajo de la monja”, donde eran las monjas las encargadas de crear los textiles de las iglesias.

Tambour y el nacimiento del crochet

La investigación sugiere que el crochet se deriva probablemente de la costura china, de una forma muy antigua de bordado conocida en Turquía, de la India, de Persia y de África del norte, que alcanzaron Europa en los años 1700s y fueron conocidas como “tambouring,” del “tambour francés” o del tambor.

En esta técnica, una tela del fondo es tensada y estirado en un marco. El hilo de rosca del funcionamiento se sostiene por debajo de la tela. Una aguja con un gancho se inserta hacia abajo y un lazo del hilo de rosca del funcionamiento elaborado a través de la tela. Con el lazo todavía en el gancho, el gancho entonces se inserta un poco más hacia adelante y otro lazo del hilo de rosca del funcionamiento se elabora y se trabaja a través del primer lazo para formar una puntada de cadena. Los ganchos del tambour estaban tan delgadamente como agujas de la costura, así que el trabajo se debe haber logrado con el hilo de rosca muy fino.

En el final del décimo octavo siglo, el tambour se desarrolló en lo que trabajó el “crochet llamado francés en el aire,” cuando la tela del fondo fue desechada y la puntada en sus el propio.

El Crochet comenzó a aparecer en Europa a principios del 1800s y pronto recibió un enorme empujón por Mlle. Riego de la Branchardiere, que era mejor conocido por su capacidad de tomar la aguja al viejo estilo del cordón y bobina, diseño los patrones de crochet que pueden ser duplicados fácilmente. Ella publicó muchos libros sobre patrones de crochet de modo que millones de mujeres pudieran comenzar a copiar sus diseños. Mlle. Riego también demandó haber inventado “Lace-Like” , hoy llamado crochet Irish.

Mi Viaje a bordo de una aguja de crochet

A bordo de una aguja de crochet para los países de habla hispana, Francia y Bélgica; ganchillo en España; unceto en Italia; haken en Holanda y hackling en Dinamarca; heckling en Noruega y virking en Suecia, tuve la oportunidad de viajar a través del tiempo y de las diferentes culturas.

Lo que me permitió observar el uso que le dieron a esta herramienta las mujeres de cada lugar. Y como ese uso determinó una identidad geográfico cultural: por eso hoy hablamos de crochet escocés, irlandés o tunecino.

Si bien el nombre alude al origen también llamó mi atención las diversas tramas de los tejidos y esto me llevo a indagar en las causas que las motivaban. Algunas, directamente relacionadas con la geografía su consecuencia directa: clima. Obviamente, las tramas más tupidas respondían a climas rigurosos y prendas de uso popular. Es el caso del escocés, tunecino o bosnio.

Las tramas de los encajes, en cambio, respondían a otras causas mas relacionadas con avatares político-económicos; como tiempo de guerra, pérdidas de cosechas, necesidad de conquistar nuevos mercados, etc. Uno de los ejemplos mas conocidos, quizás sea el de Irlanda que por motivos bélicos su mujeres tuvieron que sostener la economía disputándole mercado a las encajeras venecianas. Logrando una imitación a ganchillo del encaje de aguja que con el tiempo desarrolló carácter propio y cuyo símbolo es justamente la mundialmente conocida ?rosa de Irlanda?.

La otra causa social que motiva la delicadeza de los encajes es que estaban destinados a usos mas elitistas como indumentaria de la corte y el clero.

Estas observaciones me llevaron, indefectiblemente a comparar la similitud o imitación de las diferentes técnicas.

Por ejemplo:

El crochet filet: es copia del filet de lanzadera.

Bruselas: es una imitación al crochet del encaje de bolillos.

Irlanda: es imitación al crochet del encaje de aguja.

Miñardi: una versión al crochet del encaje de Tenerife conocido en américa como ñandutí o randas.

Los nudos del macramé y frivolité son muy parecidos.

También quiero hacer incapié en una apreciación muy común, que considero un tanto errónea. Del mismo modo, aclarar que es una visión absolutamente personal. Se asocia el tejido como una actividad eminentemente femenina. ¡Osea, cosa de mujeres!

La experiencia y la observación me llevaron a otra conclusión.

En primer lugar, el tejido nace en manos de Adán. Ya que él es quien se las ingenió para atrapar un pez, atar una canoa o un dinosaurio. Dos actividades de permanente vigencia que se puede apreciar en cualquier pueblo de pescadores o marineros ya que el macramé está basado en nudos marineros.

Eva toma estas técnicas y le da un uso personal y hogareño. A partir de allí comienza a ser una actividad femenina, incluso casi obligatoria en determinados tiempos y lugares. Como decía la ronda ?que sepa tejer, que sepa bordar?.

En segundo lugar, he notado aparte de algunos eventos en los que participé como los de la Asociación de Bordadoras Argentina (A.B.A.) que maestros diseñadores y jurados internacionales son, en su mayoría hombres menciono como ejemplo al maestro Niebling en el encaje de cinco agujas.

Y, por último, he visto que a lo largo de la historia la producción, industrialización y comercialización de fibras fueron y son manejadas por ellos. Ya sea lana, seda, algodón, etc.

Como conclusión del tema, a mi modesto entender Adán y Eva enfocan la misma actividad desde distinta óptica. Como diría un hijo mio, mientras arreglábamos un alambrado: "por favor mama, sin flores ni moñitos"

A título personal debo decir que sin proponérmelo contribuí al rescate del miñardi prácticamente olvidado en mi país. Al punto de tener que improvisar mis horquillas con diversos materiales. En algunos casos doblando agujas de tricot en forma de ?U?.

También me tomé el atrevimiento de sacar al miñardi del uso tradicional y emplearlo en prendas de vestir. Lo que me valió a nivel familiar, el mote de ?la hereje? ya que ese era el uso que hacía mi abuela doña María Lidia Castillo Alegre (¡y olé!) educada en un colegio religioso donde lo aprendió.

Sin embargo, fueron esos cambios y esas prendas las que interesaron para publicar a la revista Solo Crochet de la editorial Azul, desde el noviembre del 2000. Hecho que contribuyó a la difusión del miñardi y a partir de allí ingresaron al país las horquillas mexicanas.

Esos aportes también me permitieron participar de las exposiciones de la A.B.A. en X Encuentro Nacional Expo A.B.A. 2008.

Integrar la Feria Artesanal de San Isidro que tiene un alto nivel de exigencia para fiscalizar artesanos. Y que justamente en este caso priorizaron el rescate del miñardi (mérito de la fiscal Margarita Goldberg).

Recuerdo también que por entonces al buscar el término en la web, no figuraba, solo aparecía el de la escudería Minardi. En la actualidad veo que mi apellido también ha sido desplazado y el resultado es Nora Miñardí.

[Inicio] [Diseños] [Clases y Cursos ] [Técnica] [Contacto]